Por cesárea

by

Dillom

A mis 15 me hubiese gustado este disco. ¿Por qué? Suena a rebeldía, a un sonido que trasciende el statu quo de la música argentina contemporánea. Puede ser crudo, prolijo, parejo y desparejo, cuenta historias y a veces las entierra, va y viene en mundos paralelos, no le importa la verdad sino lo que se hace con ella. Es estúpido pensar que un chico de 24 años puede escribir letras naïve y crudas al mismo tiempo, que respiran madurez de haber vivido 40 años en el mismo barrio viendo la vida pasar. Dillom y su banda pueden ser eruditos musical o los más cirujas tocando un punk moderno como en "Buenos tiempos".

De las barras del disco, me quedo con la que acompaña al tema que hizo con Calamaro "La vida pasa rápido, puta, tic tac", o el sampleo lírico que hace
con Lali al tema de Maria Elena Walsh llamado "plegaria desvelada": "Dios mío / dame mi sueño de paz, y no de pastilla / El diablo, que nunca duerme / penando me despabila". Hay que estar despierto en esta época de violencia inconmensurable y genocidios físicos y del pensamiento.